7 feb 2010

Una noche en el Bolsón

Sentada en un bar medio under de El Bolsón con mi prima y una botella de cerveza (sí, ahora me gusta la cerveza) me puse a reflexionar con ella que, gracias a Dios, me tiró una laaarga soga para no morir ahogada.
Mi planteo era simple y claro. Bueno, quizá no era tan simple. Pero en fin, vomité una serie de confesiones, entre ellas que tenía mucho miedo de no poder encontrar en otra persona lo que él me dio, que fue absolutamente todo. "No compares; no todos aman de la misma forma, ni al mismo tiempo, ni con la misma intensidad. Probablemente no vuelvas a amar ni vuelvas a ser amada de esa forma, pero lo vas a ser de otra, e igualmente vas a estar bien", fue todo lo que atinó a decirme. Y en su momento sinceramente me conformé y seguí disfrutando de la noche. Pero ahora, sentada en la cama de una cabaña que ya me aburrió, viendo a mi prima dormir y con una luz tenue que me saca de quicio, no me siento conforme en absoluto. El sentimiento me invade de nuevo: no creo cruzarme nunca más con alguien que me haya amado como vos lo hiciste. Y aunque no lo creas, vos tampoco vas a cruzarte jamás con alguien que te ame como yo lo hago.
En el Bolsón hace frío, pero mucho más frío hace adentro mío.

1 comentario:

Juancito dijo...

No es eso lo divertido de la vida??

Nunca estamos dos veces en el mismo lugar :D



Y tmb es lo bueno del amor.. Nunca se ama a dos personas por igual...

Si hoy estas acá escribiendo sobre el q amas/aste, y amaras a alguien como amaste a aquel, entonces mañana estarias escribiendo sobre el q amas/aste ahora q amas/aste igual que al que amas/aste antes >.<


No creo q se haya entendido, pero expresarse bien no es lo q mejor hago ^^